La sobrecarga muscular es el enemigo silencioso de quienes realizan deporte con frecuencia. Aparece sin avisar y muchas veces mientras realizamos un ejercicio para el que supuestamente ya deberíamos estar habituados. Además corremos el riesgo de confundirla con una cuestión menor y que termine convirtiéndose en un problema serio y lesión mayor.
Por eso es importante que sepamos prevenir la sobrecarga muscular, identificarla a tiempo y saber qué hacer en caso de padecerla. Acudir a un especialista a tiempo nos ayudará mucho a evitar el riesgo de sufrir una lesión de mayor gravedad.
Índice de contenidos
¿QUÉ ES LA SOBRECARGA MUSCULAR?
Para identificarla es fundamental que sepamos qué es la sobrecarga muscular. Se denomina sobrecarga muscular a una contracción involuntaria y continuada de las fibras musculares. Suele ser consecuencia de una práctica deportiva repetitiva o de mala técnica de ejecución en el movimiento.
Las sobrecargas musculares no suelen impedir la práctica deportiva. Se trata más bien de una sensación molesta que te impedirá estar al 100%. Por esto muchos deportistas que están acostumbrados al “sufrimiento” y a entrenar muy duramente, desatienden este tipo de molestias y terminan derivando en lesiones más graves.
Las sobrecargas se producen progresivamente. Sabemos que el secreto para mejorar en los entrenamientos consiste mucho en mejorar el TUT (tiempo bajo presión). Por este motivo en muchos entrenamientos forzamos nuestro límite para conseguir mejor TUT.
Cuando nos excedemos demasiado en dicha tensión el músculo ofrece un “patrón de seguridad” por tensión. En este punto comenzamos a sufrir una sobrecarga muscular: el músculo no consigue relajarse.
Los grupos musculares donde son más frecuentes las sobrecargas están en el tren superior. Brazos, cuello y hombro suelen ser los más comunes.
Debemos mencionar que no solo la práctica deportiva puede causar esta afección. También las malas posturas y el estrés con culpables en muchos casos de las sobre cargas en la zona del cuello y cervicales, por ejemplo.
TRATAMIENTO PARA MÚSCULOS SOBRECARGADOS
A continuación vamos a tratar una serie de recomendaciones básicas para prevenir y tratar las sobrecargas musculares.
- La mejor manera de prevenir las sobrecargas musculares es calentar y estirar el grupo muscular antes de realizar la actividad física.
- Realiza un plan de entrenamiento acorde con tu condición física real.
- Del mismo modo al terminar el ejercicio se recomienda no hacerlo de forma brusca, sino realizar unos minutos de repeticiones de baja intensidad y estirar a la conclusión.
- Hidrata tu cuerpo antes, durante y tras la práctica deportiva con abundante agua.
- Tomar antiinflamatorios desde el comienzo del padecimiento puede ayudarte mucho. Los analgésicos de manera controlada también pueden ayudarte.
Algunos especialistas recomiendan aplicar calor en el grupo muscular afectado. Sin embargo está científicamente probado que si este calor es superficial y no alcanza al músculo, difícilmente nos va a ayudar.
Los masajes pueden ser de gran ayuda para desinflamar los músculos, nos ayudan a eliminar ácido láctico, relajar la zona e ir recuperándola.
Existen tratamientos innovadores para la recuperación muscular. Algunos, como la crioterapia, han demostrado en deportistas de élite una eficacia sobresaliente en cuanto a la recuperación. Tanto para cuestiones de dolor muscular, lesiones profundas o calambres. Y es que la función termogénica y desinflamatoria de esta terapia es muy profunda.
SÍNTOMAS DE LA SOBRECARGA MUSCULAR
Quienes no han sufrido antes de sobrecarga muscular a menudo pueden confundirlo con otro tipo de dolencias que también genera el deporte. Es el caso de los calambres y las roturas musculares o roturas fibrilares.
Los calambres son contracturas súbitas o espasmos, intermitentes e involuntarios de los músculos. Son incómodos aunque no muy doloroso. Suelen durar de unos segundos a varios minutos. No es habitual que se prolonguen por horas en el mismo grupo muscular.
Las roturas musculares se presentan de forma súbita y son muy dolorosas en el momento de producirse. De hecho tiene una sensación de chasquido, incluso pueden llegar a producir un sonido parecido a un latigazo. Responden a la rotura de un músculo en una parte concreta.
Las roturas fibrilares son roturas de una cantidad pequeña de fibras de un músculo. Se sienten como un pinchazo de una aguja en una parte concreta del músculo. Suelen ser muy localizables y aparecen de forma repentina.
A diferencia de las tres afecciones mencionadas la sobrecarga muscular va apareciendo poco a poco a poco. La sensación de pesadez en los músculos afectados se va acumulando hasta ser dolorosa o incluso insoportable.
Si sientes que estás comenzando a sufrir sobrecarga muscular o ya has intentado muchas cosas para mejorar sin resultados, es el momento de probar una técnica eficaz y rápida. No dudes en llamar a CRYOmx y agendar tu cita.